¡TODO VOLVERÁ!

Estoy acostado en mi cuarto mientras veo por la ventana cómo la lluvia golpea suavemente el asfalto. Es inevitable que el sonido de las gotas al caer me traiga distintos recuerdos: un abrazo, una persona o un momento. Mi dilema se plantea mientras en mi país el sol empieza a caer.

Qué difícil es cuando, de la nada, la vida queda recluida a cuatro paredes. ¿Quién no extraña sentir el  calor del sol sobre su piel? Una cerveza con alguien bajo cualquier pretexto. O simplemente salir con la tranquilidad de que las cosas están en su cauce natural. Pero solo me queda esa sensación increíble de encierro, de no saber qué nos depara como sociedad. Eso y un poco de soledad.

A lo mejor ustedes están como yo me encuentro en este momento mientras les escribo. Pero me siento nostálgico del pasado y ansioso del futuro. Quiero ver a este presente como una simple pausa. Quiero volver a los abrazos, a mis amigos, a poder salir solo a tomarme un café; o simplemente ir a hacer las compras y que todo esté normal. Pero, por el momento, quédense en sus casas. Acatemos las normas y esperemos salir adelante de esto juntos.